La prohibición del bingo con dinero en los centros de mayores de Cataluña, incluidas residencias, centros de día y hogares de jubilados, a debate en el Parlamento autonómico con motivo de la presentación de una propuesta del grupo socialista (PSC)-Units per Avançar para modificar esta restricción, es para la directora general de L'Onada Serveis y presidenta de la patronal catalana ACRA, Cinta Pascual, "una medida absurda" que espera se resuelva en próximas fechas.
"Es una medida absurda y hay numerosas cuestiones más importantes que tratar", ha afirmado Pascual, que como directora general de L'Onada Serveis ha cambiado en los centros de la organización los céntimos por las fichas de plástico para que sus usuarios puedan seguir compartiendo esta actividad en grupo en la que se juegan cantidades simbólicas de dinero que no llegan a un euro y que supone beneficios terapéuticos para los mayores.
La práctica del bingo mejora la capacidad de atención y la memoria visual y auditiva, además de la estimulación cognitiva de la persona, ha comunicado L'Onada Serveis, que ha explicado que es una de las actividades con mayor participación en los centros y que los mayores esperan con más ilusión, así como congrega a la totalidad de los usuarios.
De hecho, la prohibición de jugar al bingo está llegando a afectar de forma negativa a la predisposición de los mayores a reunirse en los hogares de jubilados, ha señalado L'Onada Serveis, organización líder en sector de la tercera edad y la atención a las personas en situación de dependencia con más de 20 años de experiencia y que dispone de más de 30 centros residenciales y de día en Cataluña y Valencia.
En la actualidad, ha recordado L'Onada Serveis, la prohibición del bingo de la Generalitat de Cataluña contempla sanciones de hasta 3.000 euros por jugar 20 céntimos de euro.
Ante esta situación, el grupo socialista (PSC)-Units per Avançar en el Parlamento de Cataluña ha presentado una propuesta de resolución que se debatirá tras el descanso estival para modificar el artículo 2 del decreto 86/2012 de aprobación del Reglamento de los Juegos de Bingo, que se deriva de la Ley del Juego.
Con el cambio propuesto por este grupo parlamentario, se podría ejercer esta actividad recreativa fuera de las salas de bingo y casinos, como ya ocurre en las comunidades autónomas de Valencia y Murcia, con limitaciones de tiempo e importe económico. Así, se podría jugar de 16.00 a 20.00 horas de lunes a viernes y una hora menos, hasta las 19.00 horas, los fines de semana, mientras que el precio del cartón no podría superar los 20 céntimos de euro y el dispendio total de la partida entre todos los jugadores sumaría un máximo de 20 euros.