Un estudio de La Caixa sobre envejecimiento denominado "Envejecer en casa. ¿Mejor en el pueblo o en la ciudad?", publicado por el Observatorio Social de esta entidad, ha concluido que dos de cada diez mayores residentes en España, es decir, más de 1,5 millones de personas de este colectivo, habitan en viviendas que acumulan problemas graves.
En concreto, este informe del Observatorio Social La Caixa, elaborado por la doctora en Sociología Irene Lebrusán, señala que un total de 1.596.675 mayores de 65 años en España, lo que supone el 20,1 por ciento de ellos, sufren vulnerabilidad residencial extrema.
"Existe una elevada proporción de personas mayores que viven en casas que no reúnen los requisitos para permitir una vejez de calidad", recoge el estudio de La Caixa, que señala que, con los problemas detectados, quienes tienen una edad avanzada "pueden ver acelerada la vulnerabilidad generalmente asociada a la vejez".
Estas carencias se registran, sobre todo, en las ciudades de entre 10.000 y 100.000 habitantes y, entre ellas, en las que tiene entre 20.000 y 50.000 residentes, en las que el porcentaje de mayores en casas en condiciones muy deficientes se eleva al 23,5 por ciento.
"Las personas mayores que residen en ciudades medias estarían experimentando un 'envejecimiento de segunda', de inferior calidad, respecto de las personas mayores que viven en agrupaciones urbanas de otros tamaños", recoge el informe.
Esta diferencia se atribuye a que "las ciudades de tamaño medio no se han podido beneficiar, ni de las medidas solidarias de los municipios rurales, ni de las medidas de control y los recursos públicos para luchar contra la infravivienda de los municipios de mayor tamaño".
Los problemas en las viviendas que inciden sobre un mayor número de mayores son los de accesibilidad (5.289.113 personas), falta de calefacción o aparatos para calentar la casa (3.355.129 afectados), edificio de más de tres plantas sin ascensor (1.740.376) y hacinamiento (959.936 de ellos).
Otra deficiencia detectada es la falta de acceso a agua corriente, que, aunque afecta a un menor número de mayores que las anteriores (431.818 personas), se considera una problema grave, ya que el agua es un bien necesario, imprescindible para obtener la cédula de habitabilidad de una vivienda y del que dispone casi la totalidad de la población española.
La Obra Social La Caixa impulsora de este estudio "Envejecer en casa. ¿Mejor en el pueblo o en la ciudad?, desarrolla desde sus orígenes, hace más de cien años, un amplio programa para mayores que les ofrece actividades y recursos con 615 centros, propios o en convenio con administraciones públicas, en toda España.
Anualmente, 821.532 personas mayores participan en sus más de 17.500 iniciativas sociales, culturales, de salud y tecnológicas, destinadas especialmente al fomento del envejecimiento activo, la participación social, y el respeto y la dignidad de este colectivo.