La residencia Samaniego recibe la acreditación como libre de sujeciones que la Confederación Española de Organizaciones de Mayores (CEOMA) otorga a los centros en los que no se limita la libertad de movimientos de la persona, su actividad o el normal acceso a cualquier parte de su cuerpo mediante métodos físicos externos de los que no sea posible liberarse con facilidad.
Esta acreditación como Centro Libre de Sujeciones de CEOMA, pionera en España junto al programa de esta Confederación "Desatar al anciano y el enfermo de Alzheimer" que dirige Antonio Burgueño, culmina el proceso "tolerancia cero a las sujeciones" puesto en marcha en 2017 en esta residencia de la Diputación Foral de Álava en la localidad de Samaniego.
Desde entonces, la residencia Samaniego, centro gestionado por el Instituto Foral de Bienestar Social (IFBS) con 48 plazas de residencia y 4 de atención diurna para personas mayores dependientes con discapacidad física y psíquica como deterioro cognitivo, enfermedad mental y demencias, ha implantado este modelo con la participación de sus 40 trabajadores y de los propios usuarios, así como la implicación de las familias.
Para ello, con la formación y seguimiento de CEOMA, el IFBS ha acondicionado espacios con el fin de garantizar la seguridad física de los usuarios y minimizar los riesgos, ha trabajado en el fortalecimiento de las capacidades físicas y funcionales de los mayores mediante rehabilitación y paseos diarios, y ha dado información a todo el equipo sobre las personas tratadas con anticoagulantes, con alto riesgo de caídas y que precisan de una mayor vigilancia, entre otras medidas.
Samaniego es el segundo centro público para mayores del Estado español que recibe la acreditación como Centro Libre de Sujeciones de CEOMA, tras el de Nuestra Señora de Las Nieves de la localidad de Oyón/Oion, también de la Diputación Foral de Álava, que hace cinco meses se convirtió en la primera residencia de este tipo en obtener la certificación.
Durante los últimos 14 años y de forma progresiva, ha informado la Diputación Foral de Álava, los profesionales de residencias de personas mayores del IFBS se han formado, de la mano de CEOMA, en la paulatina supresión de sujeciones, desde el convencimiento de que el no uso de sujeciones implica un menor riesgo de caídas y de que éstas, si se producen, tienen como consecuencia lesiones de menor gravedad.
De forma paralela, en todas las residencias que gestiona el IFBS se han ido adquiriendo productos de apoyo que son alternativa a las sujeciones, como alfombras antideslizantes para las sillas, camas a diferentes alturas, sillas basculantes, detectores de movimiento en habitaciones y puertas, o sensores en las sillas de ruedas.