Los Presupuestos del Estado recogen un aumento del 60% para la Dependencia, el más alto desde que se creó el Sistema de Autonomía Personal y Atención a la Dependencia (SAAD), frente a los recortes que ha sufrido en los últimos años, ha comunicado el Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social tras la presentación de las cuentas públicas.
Los fondos destinados a Dependencia, uno de los pilares del Estado del Bienestar, en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para el presente año registran un incremento de 831 millones de euros, hasta alcanzar un total de 2.231 millones de euros.
“Con este importante esfuerzo presupuestario se podrá rebajar en torno al 75% la lista de espera de los casos más graves, los dependientes de grado III y grado II, en torno a 75.000 personas”, ha indicado la ministra de Sanidad, Consumo y Bienestar Social, María Luisa Carcedo, durante la presentación de las partidas de las cuentas correspondientes a sus departamentos.
La aportación al nivel mínimo, que son los fondos que destina el Estado por cada beneficiario a las Comunidades Autónomas, crece en 415 millones de euros, lo que supone un 31,7% más, así como se vuelve a financiar el nivel acordado con 100 millones de euros, una vía de financiación del sistema a las administraciones autonómicas que se fijó en el artículo 10 de la Ley de Dependencia para mantenerse hasta el año 2015 y que, sin embargo, se eliminó en 2012.
Este incremento presupuestario, además de atender al crecimiento de beneficiarios, permitirá, ha explicado el Ministerio, la financiación de una nueva prestación de teleasistencia avanzada consistente en la supervisión remota del usuario de forma que, además de ofrecerle asistencia, se podrán conocer patrones de vida asociados a la prevención de posibles situaciones de necesidad.
A ello se suma, además, la recogida en los PGE de la cotización de las cuotas a la Seguridad Social de los cuidadores no profesionales de las personas en situación de dependencia, con una partida de 315 millones de euros. El Ministerio calcula que la recuperación de esta prestación, que se eliminó en 2012, beneficiará a unas 180.000 personas, en su mayor parte mujeres.
El aumento del 60% de los fondos destinados a Dependencia en los Presupuestos del Estado se enmarca en unas cuentas públicas que en el ámbito de Sanidad, Consumo y Bienestar Social ascienden a un total de 3.133,56 millones de euros, repartidos en 2.716,49 millones para Servicios Sociales (un 47,4% más); 364,87 millones de euros para Sanidad y Consumo; y 52,19 millones para servicios generales.
Estos presupuestos de Sanidad, Consumo y Binestar Social, centrados en reforzar el Estado del Bienestar, la recuperación de derechos sociales en Sanidad y Dependencia, y el aumento de recursos contra la pobreza infantil, incluyen la eliminación del copago farmacéutico para pensionistas con rentas inferiores a 11.200 euros anuales y perceptores de las prestaciones económicas de la Seguridad Social por hijo a cargo.
Más de ocho millones de personas, ha calculado el Ministerio, se beneficiarán directamente del aumento de fondos para Dependencia y la eliminación de copagos.
“Son unas cuentas que reflejan el papel de liderazgo y compromiso del Ministerio de Sanidad, Consumo y Bienestar Social con la equidad y la cohesión social en las políticas sanitarias y sociales”, ha destacado María Luisa Carcedo.
En cuanto a la protección a las familias, los PGE para el área contemplan un aumento de los fondos en 266 millones, destinados principalmente contra la pobreza infantil, al igual que recogen un incremento de la prestación por hijo a cargo en un 17% con carácter general y en un 101% para niños y niñas en situación de pobreza severa.