Ruptura de las negociaciones del Convenio de la Dependencia. La Mesa Negociadora del VIII Convenio Colectivo de la Dependencia se reunía el 11 de octubre para proseguir en la búsqueda de un acuerdo y ante la presión de los sindicatos, que habían dado de plazo máximo esta fecha para alcanzarlo. Al no haberse logrado, los bandos negociadores han paralizado las conversaciones.
De hecho, Lares ni siquiera acudió a la reunión del 11 de octubre, al considerar que tanto la posición de CEAPs como la sindical “no admiten alternativas”. “Solamente piensan en resolver las necesidades de una parte”, explica Lares en una nota.
Lares considera “un error plantear crecimientos salariales desconociendo que las Administraciones Públicas en España están discriminando a las personas mayores en relación a las personas que se encuentran en situación de discapacidad y dependencia”, según destaca. Lares también tilda de “error” no tener en cuenta “que más de 10.000 personas mayores son atendidas todos los años en nuestro país en centros residenciales sin ánimo de lucro”, algo que achaca a que “el sistema de dependencia les ha excluido de atención y carecen de recursos económicos para financiar el coste básico de una plaza privada”.
La ausencia de Lares se ha producido en la misma reunión tras la que CEAPs, el Círculo Empresarial de Atención a Personas, ha anunciado la ruptura de las negociaciones entre la patronal y los sindicatos. CEAPs considera inasumible el plazo de dos años que exigen los sindicatos para implementar las mejoras salariales y laborales que reclama en el nuevo Convenio, especialmente si las Administraciones Públicas no incrementan en paralelo las tarifas.
Los sindicatos exigen un alza salarial del 10 % entre 2019 y 2020. CEAPs, aun estando de acuerdo en la necesidad de mejorar tanto los salarios como las condiciones laborales del sector, propone poner en marcha un “preacuerdo de Convenio” que permita realizar los cambios de manera progresiva y asumible para las empresas del sector. “Habrá que buscar necesariamente periodos más prolongados para que esa adaptación sea factible y no genere prejuicios ni al sector, ni a los usuarios”, ha expresado CEAPs. Un punto que los sindicatos no aceptan, y por el que habían dado un ultimátum a la patronal para alcanzar un acuerdo el 11 de octubre, que finalmente no ha llegado.
Ante la ruptura de las negociaciones del VIII Convenio Colectivo de la Dependencia, CEAPs ha explicado que continuará “luchando por la dignificación del sector, pero de forma que sea sostenible para los profesionales, para lo cual es imprescindible, por una parte, que la Administración cumpla sus obligaciones económicas y, por otra, que los avances no provoquen prejuicios al sector”.
Por su parte, el sindicato Comisiones Obreras (CCOO), que formaba parte de la Mesa Negociadora, ha anunciado “movilizaciones en el sector de la dependencia” y ha calificado de “intolerable” la actitud de la patronal. “La representación empresarial ha dado muestras de una miopía intolerable con un sector donde cada vez más existen dificultades para contratar a profesionales”, ha explicado el sindicato en un comunicado.
Comisiones Obreras considera que la firma del convenio ofrecido a la patronal, que incluía una subida salarial hasta un mínimo de 1.000 euros mensuales para los profesionales del sector, “sería una herramienta para exigir a las distintas Administraciones que cumplan con lo recogido en la Ley 39/2006, de 14 de diciembre, de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a las personas en situación de dependencia, garantizando la financiación comprometida que actualmente no cumplen”.