DomusVi Monte Alto incorpora unidad de salud mental con 20 plazas especializadas en tratar a personas con trastornos mentales graves.
Se trata de una iniciativa novedosa que DomusVi ha puesto en marcha en su residencia Monte Alto, ubicada en Jerez de la Frontera (Andalucía). Un recurso que entronca en la estrategia de la compañía por potenciar su área de salud mental.
La unidad de salud mental de la residencia Monte Alto contará con instalaciones independientes del centro principal y estará equipada con un salón de terapias, sala de televisión, comedor propio o patio exterior.
El objetivo de esta unidad de salud mental de DomusVi Monte Alto es favorecer la mejora de personas con trastorno mental grave a través de terapias encaminadas a la recuperación o adquisición de habilidades personales y sociales necesarias para un normal desenvolvimiento en comunidad.
Para ello, la unidad contará con un equipo de profesionales de DomusVi especializados en medicina, enfermería o trabajo social y terapéutico, siempre con el enfoque en la salud mental como diferenciación del resto de servicios que presta la residencia a personas con otro tipo de necesidades.
El cuidado de la salud mental es un área a la que cada vez se presta mayor atención en el sector sociosanitario, en parte porque en ella confluyen tanto los problemas puramente mentales (trastornos psiquiátricos, entre los que se incluyen uno tan frecuente entre mayores como la depresión) como las demencias y los problemas cognitivos, con enfermedades como Alzheimer entre los mayores retos.
DomusVi anunció hace unos meses la reorganización de su división de salud mental bajo la marca Mentalia Salud. La iniciativa arrancó con ocho centros, ubicados en Ávila, Lérida, Guadarrama, Langreo, Valencia, Olave, Usurbil y Las Palmas. En total, la compañía puso a disposición de estos centros y de sus unidades de salud mental en residencias y centros de día a más de 600 profesionales, especializados además en la aplicación de novedosos enfoques y tratamientos para trastornos mentales graves en personas mayores. La oferta comprende más de un millar de plazas adaptables a las necesidades de cada paciente, pero siempre con el foco puesto en el fomento del bienestar, la autonomía personal y la inclusión social, todo ello a través de un programa que además tiene en cuenta la opinión de las familias, más allá de la de los profesionales de cada centro.