Trabajadores de la dependencia secundan movilización para exigir mejoras laborales y salariales en un sábado de protestas que se han repetido por varios puntos de España. La jornada, convocada por la Federación de Sanidad y Sectores Sociosanitarios de Comisiones Obreras, ha reunido frente a las puertas del Ministerio de Sanidad, en Madrid, a unas 6.000 personas, según cifras del propio sindicato.
La movilización del 14 de diciembre forma parte de la gran campaña de movilizaciones anunciada por los sindicatos tras la ruptura de las negociaciones sobre el Convenio de la Dependencia. Los sindicatos que formaban parte de la mesa negociadora exigen ahora en las calles las mismas medidas que exigían durante la negociación, entre ellas el aumento del salario mínimo en el sector hasta los 1.000 euros mensuales en 14 pagas para el año 2020.
Que la movilización tuviera lugar frente a las puertas del Ministerio de Sanidad se puede explicar por la postura de la patronal del sector, que aseguró desde el primer momento estar dispuesta a aceptar la mejora de las condiciones laborales y salariales de los empleados por el impacto directo que estas medidas tendrían sobre los usuarios finales, pero ligaba toda decisión a la necesidad de aumentar los precios que pagan las Administraciones públicas a las empresas. Sin esa subida, el sector, aseguraron en su momento, no podía asumir el incremento salarial en un margen de tiempo tan reducido como el exigido por los representantes sindicales.
Desde que saltara por los aires la negociación, ninguna de las partes ha vuelto a reunirse para hallar una salida consensuada a un problema que corre el riesgo de enquistarse. Aunque tanto la patronal como los sindicatos han asegurado en todo momento estar dispuestos a retomar las negociaciones. No obstante, desde Comisiones Obreras (CCOO) sí han asegurado que “continuarán las movilizaciones si desde la patronal y el Gobierno no se toman medidas para revertir esta situación” en que se encuentran no solo los empleados, sino los propios usuarios. Según datos del Imserso divulgados por CCOO, una de cada cinco personas reconocidas en situación de dependencia está a la espera de su prestación, lo que implica casi 270.000 personas en esta situación en España. De ellas, más de 100.000 son grandes dependientes. Y hay otras 130.000 personas a la espera de valoración.
“Es fundamental el incremento de la financiación por parte de la Administración del Estado para equilibrar la financiación con las Comunidades Autónomas, que hoy podría superar el 80 %”, aseguran desde el sindicato, que también invita a buscar “la firma del Convenio, con la complicidad de todas las partes” para llegar a “la reversión de la actual situación”, de la que culpa a las empresas del sector.