La Federación Empresarial de la Dependencia (FED) ha censurado el protocolo de diagnóstico de coronavirus en residencias de mayores elaborado por el Ministerio de Sanidad. El Gobierno está realizando una campaña masiva de test de diagnóstico de la enfermedad a una muestra de la población y a colectivos especialmente vulnerables al contagio, como sanitarios o residencias de mayores.
Para este último punto, y según se detalla en la ‘Guía para la utilización de test rápidos de anticuerpos para COVID-19’, se ha propuesto que cuando en un centro residencial para la tercera edad se obtenga una prueba positiva, se considere al centro contagiado, se ponga a todos los residentes en cuarentena y se paralice la realización de más test al resto de usuarios.
La FED considera “muy restrictivo” este protocolo, que considera que “demuestra un absoluto desconocimiento del funcionamiento de nuestros centros”, según ha explicado Ignacio Fernández-Cid, presidente de la Federación.
Fernández-Cid ha calificado de “clara desconsideración hacia las personas mayores” este protocolo, “al tratarlas de forma indiscriminada”. A ello se une que “esta falta de realización de test puede incrementar los contagios, en lugar de disminuirlos”.
Las empresas del sector llevan semanas pidiendo la realización de test de detección del coronavirus a sus residentes y empleados para poder aislar a los usuarios y trabajadores con datos científicos que permitan conocer el alcance de los brotes en cada caso. Aunque las medidas anunciadas en un primer momento por el Gobierno se encaminaban en esa línea, la actualización de la Guía ha supuesto un jarro de agua fría para el sector, que ahora ve cómo la realización de estas pruebas tendrá limitaciones en el caso de las residencias de mayores precisamente cuando se detecte un positivo, lo que, en todo caso, precisaría realizar pruebas a todos los residentes para alcanzar el nivel de contagios alcanzados.
Además, se ha demostrado que los pacientes asintomáticos son los que mayor peligro entrañan a la hora de expandir la enfermedad, pues ni ellos ni quienes están a su alrededor sospechan que puedan estar contagiando a terceros, a pesar de que sí lo están haciendo.
“Es importante detectar precozmente los casos e investigar los posibles brotes para controlar esta pandemia en nuestros centros”, explica Fernández-Cid. “Nuestro sector no tiene inconveniente en tratar a todos los mayores como afectados si existe un positivo en cualquier centro, pero es imposible asegurar la prevención de contagios sin el personal ni los materiales necesarios”, añade.
La Federación Española de la Dependencia, como otras patronales y empresas del sector, han pedido en retiradas ocasiones al Gobierno y a las Administraciones que les hagan llegar materiales de protección y útiles médicos -junto a profesionales de la sanidad- para poder tratar a los mayores infectados. “Es imposible tener distribuidos y aislados a todos los residentes y en todos los espacios de la residencia porque no hay personal ni material suficiente”, explica Fernández-Cid en el comunicado de la FED.