En España hay 2,9 millones de personas que padecen osteoporosis, según datos de la Fundación Internacional de Osteoporosis. Una dolencia calificada de ‘silenciosa’, por no dar síntomas, que provoca fragilidad en los huesos, lo que puede derivar en la fractura de los mismos ante cualquier golpe o incluso de forma fortuita en el día a día.
La osteoporosis afecta mayoritariamente a mujeres, en una proporción de 79 a 20. Se calcula que el 22 % de las mujeres de 50 años o más padece osteoporosis, frente al 6,8 % de los hombres en el mismo rango de edad. La media en la población es de alrededor del 5,5 %.
La Fundación recuerda que el principal riesgo de sufrir osteoporosis son las fracturas, “que afectan fundamentalmente a adultos mayores, a menudo provocan dolor y discapacidad a largo plazo, así como costos sustanciales para el sistema de atención médica”. En España se produjeron 289.000 fracturas asociadas a la osteoporosis en 2019, alrededor de 33 al día, lo que implica algo más de una fractura por hora. Un problema que genera casi el 4 % del gasto sanitario, unos 4.300 millones de euros al año solo en España.
Uno de los grandes problemas de estas fracturas está en los índices de mortalidad que se asocian a, por ejemplo, la fractura de cadera en personas mayores. Pero también las hay en columna vertebral, lo que demuestra la potencial gravedad de estas situaciones.
Al respecto, el presidente de la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología, José Augusto García Navarro, considera que “entre 2019 y 2034, debido a factores demográficos, esperamos que la cantidad de fracturas en España aumente alrededor del 29,6 %”, y reclama que “las autoridades sanitarias y los profesionales sanitarios deben tomar medidas para hacer frente a este aumento previsto”. “Es imperativo que hagamos todo lo posible para garantizar que las personas con alto riesgo de fractura tengan acceso a un diagnóstico y tratamiento oportunos y que existan sistemas para brindar atención sistemática posterior a la fractura para aquellos que ya han sufrido una fractura por fragilidad”, detalla.
Los expertos recomiendan que la osteoporosis sea debidamente tratada, ya que existen fármacos que contribuyen a frenar el progreso de la enfermedad e incluso pueden revertir, dentro de ciertos límites, el desgaste. “Sin tratamiento para la osteoporosis, las personas con alto riesgo permanecen desprotegidas contra fracturas potencialmente debilitantes y potencialmente mortales”, explican desde la SEGG.