En verano, muchas familias no pueden cuadrar adecuadamente sus vacaciones y se encuentran en la tesitura de qué hacer con los niños. Muchos van a campamentos de verano, otros se quedan con niñeras y muchos tienen en sus abuelos y abuelas a quienes se encargan de ellos desde primera hora de la mañana hasta bien entrada la tarde.
Un estudio de la Fundación Edad&Vida reveló en 2021 que el 40 % de los mayores cuidan a sus nietos en algún momento. Algo que genera una disrupción en su día a día, que pasa a asumir una importante obligación con nuevas rutinas y tareas que van desde la preparación de la comida hasta salir al parque o acompañar a los niños a actividades deportivas para verano.
“Queremos concienciar a los abuelos cuidadores de que el autocuidado es indispensable para poder cuidar con garantías y que, además de una alimentación saludable, ejercicio físico e intelectual, no debemos descuidar la salud auditiva, clave para mantener una vida activa y fortalecer la vida social y disfrutar de los nietos”, explica María José Abraham, directora general de la Fundación Edad&Vida.
La Fundación Edad&Vida, en colaboración con la red de centros auditivos Aural, tiene a disposición un díptico para detectar problemas de audición y evitar, con ello, situaciones de aislamiento social que dificulten las relaciones sociales entre nietos y abuelos.
Ambas instituciones siguen trabajando para concienciar a todas las personas mayores, y en particular a los abuelos cuidadores, que la pérdida auditiva se debe tratar para frenar la pérdida de audición, ya que, si no se trata, la situación va empeorando y la persona deja de oír más cantidad de sonidos en determinadas frecuencias, por lo que va aumentando la dificultad de comprensión y poco a poco van quedando fuera de las conversaciones, por lo que tienden a aislarse y perder parte de la relación con sus nietos.
Jaume Forner, de Aural, explica que el uso correcto y a tiempo de unos audífonos facilita que las personas mayores puedan estar totalmente integradas a su entorno y advierte que hay que aceptar la situación, acudir al otorrinolaringólogo para que pueda realizar un diagnóstico y determinar si hay pérdida auditiva.
Por su parte, en los centros de audición un experto evaluará el nivel de pérdida y buscará la solución que mejor se adapte a cada necesidad para mejorar la audición y poder disfrutar de los nietos.
Finalmente, tal y como explica Abraham, “apoyamos plenamente las relaciones abuelos/nietos, siempre que no se conviertan en una obligación, ya que el fortalecimiento de este nexo intergeneracional permite transferir valores y compartir experiencias de vida enriquecedoras para todos. Los nietos afianzan los vínculos afectivos y su propia identidad. Por su parte, los mayores tienen en los nietos una puerta de entrada a un mundo cada día más rápido y cambiante del que también forman parte”.