El geriatra estadounidense Bill Thomas identificó hace años lo que llamó las tres plagas que amenazan el bienestar de las personas mayores: la soledad, el aburrimiento y el sentimiento de inutilidad. Estas, según advertía, pueden deteriorar tanto la salud mental como la física.
Frente a ese panorama, surgen alternativas como el cohousing senior, un modelo de convivencia para personas mayores que permite envejecer acompañado, activo y con propósito. Lejos de la soledad no deseada y con un entorno que fomenta la ayuda mutua, este tipo de comunidades se presentan como una forma eficaz de prevenir la dependencia y mantener la autonomía personal.
José María Pastor lleva desde 2004 dedicando al mundo de las personas mayores en el grupo Júbilo Comunicación, en el Grupo Senda, en NGD (Noticias y Gestión de la Dependencia), Guía de Mayores, y fue el creador e impulsor del Congreso Internacional de la Dependencia que se celebra en IFEMA.
Ahora se embarca en el mundo de las viviendas colaborativas para personas mayores con Cohousing 3C y en esta entrevista explica con detalle en qué consiste este modelo:
- Para empezar y situar, ¿qué es un cohousing senior y de dónde viene la idea?
El cohousing es una forma de vivir que nació en Dinamarca en los años sesenta, cuando un grupo de vecinos decidió crear un entorno donde compartir espacios, servicios y compañía sin renunciar a su independencia. Esa idea se extendió rápidamente por Europa y llegó a España hace unos años.
En el caso de Cohousing 3C, hemos querido adaptar ese modelo a nuestra cultura y a las necesidades actuales de las personas mayores, combinando autonomía, apoyo mutuo y calidad de vida.
- ¿Qué diferencia al modelo Cohousing 3C de otras fórmulas de vivienda para mayores?
Lo primero es que vamos a ser más rápidos que otros proyectos que se han desarrollado en España y que desde el momento en que se formó un grupo de personas con intereses comunes y después una cooperativa, hasta que se puso en marcha, pasando por la búsqueda de suelo para después edificar, transcurrieron muchos años. Nosotros no vamos a tardar más de un año.
Pero lo que nos distingue de verdad son las tres C que dan nombre al proyecto: colaborar, compartir y cuidar. No es sólo un lema bonito, es una forma de vivir. Colaborar significa implicarte, participar activamente en la comunidad.
Compartir es la clave de la sostenibilidad, porque al unir esfuerzos podemos acceder a servicios de alta calidad a un coste muy razonable. Y cuidar es el alma del proyecto: cuidarse uno mismo, pero también cuidar de los demás, creando una red de apoyo real y humana.
- Habla de colaboración y comunidad, pero ¿puede cada persona mantener su independencia?
Por supuesto. Cada residente tiene su propio apartamento privado de no más de 50 metros, completamente equipado, con habitación, baño, cocina americana y salón con terraza.
La diferencia es que además de tu espacio personal, tienes zonas comunes donde compartir momentos, actividades y servicios con tus vecinos. Así mantienes tu autonomía, pero con la tranquilidad de no estar solo.
Cuando hablamos de zonas comunes, hacemos referencia a varios tipos de restaurantes (desde económicos a menú a la carta), comedores, lavandería, gimnasio, enfermería, huerto, jardines...
- Uno de los objetivos que mencionan es combatir la soledad y prevenir la dependencia. ¿Cómo se consigue eso en la práctica?
La soledad no deseada es uno de los grandes retos del envejecimiento. En España hay más de dos millones de mayores que viven solos, y eso tiene un impacto enorme en la salud y el bienestar.
En Cohousing 3C proponemos envejecer acompañados, con una comunidad que te apoya y te anima a seguir activo. Además, tenemos personal de enfermería preventiva 24 horas, terapeutas y servicios que ayudan a mantener la autonomía mucho más tiempo.
Luego cada uno puede hacer lo que quiera y si prefiere quedarse un día en su apartamento porque no le apetece salir, pues se queda. Pero la idea es compartir y cuidarse y participar en las actividades que se realizan todos los días en comunidad.
- El modelo económico parece también muy innovador. ¿En qué consiste el derecho de uso?
Sí, es una de las claves del proyecto. Aquí nadie compra una vivienda en propiedad, sino el derecho de uso de por vida a través de una cooperativa. Eso quiere decir que eres socio y puedes disfrutar de tu apartamento todo el tiempo que quieras.
Y lo mejor es que el importe inicial funciona como una fianza que se devuelve íntegramente cuando dejas la vivienda o falleces. Como suelo decir, “esto elimina de un plumazo una de las mayores preocupaciones: ese dinero siempre vuelve a la familia”.
En España, el 85% de las personas mayores tiene una vivienda ya pagada. Nosotros no decimos lo que tienen que hacer con ella porque, de hecho, existen muchas opciones para rentabilizarla. Ya saben, rentas vitalicias, nuda propiedad, hipotecas inversas, alquiler... Pero lo que es indudable es que si salen de la casa y la venden se libran de todos los gastos derivados de su mantenimiento, como comunidad, IBI, seguros, tasas de basura, suministros (agua, luz, electricidad...) y demás impuestos.
Aquí, lo importante, es poder elegir y que cualquier cambio en nuestra vida esté siempre, en la medida de lo posible, en nuestra mano.
- ¿Y qué incluye la cuota mensual?
La cuota ronda los 250 euros e incluye la gestión del complejo, enfermería preventiva las 24 horas, seguridad, mantenimiento, limpieza de zonas comunes, terapeutas, seguros e impuestos, así como los suministros de agua, luz, calefacción y aire acondicionado.
Luego, los servicios personales, como comidas o limpieza dentro del apartamento, se pagan solo cuando se usan. Es una manera justa y eficiente de acceder a una atención de calidad, gracias al efecto de la economía de escala.
Cuantos más vecinos seamos, más servicios podemos tener y a un coste menor. No se trata de gastar más, sino de compartir mejor. Por eso yo promuevo, y espero, que los cohousing sean lo más grandes posible. Así habrá más posibilidades de hacer más cosas.
- ¿Podría decirse que Cohousing 3C no es solo un sitio donde vivir, sino un proyecto de vida?
Exactamente. Cohousing 3C no es solo un lugar donde pasar los días, es un proyecto de vida. Queremos ofrecer algo más que paredes, techos y unas cuantas actividades. Ofrecemos un espacio donde la madurez se vive con intensidad, participación y alegría.
Aquí las personas se sienten útiles, acompañadas y con propósito; participan en decisiones, comparten experiencias, celebran logros y se apoyan mutuamente. Esa combinación de autonomía y comunidad genera una sensación de libertad y bienestar que, paradójicamente, en otros ambientes a menudo se pierde con los años.
Cohousing 3C quiere ser un lugar donde el tiempo no se mide solo en calendarios, sino en momentos de risa compartida, proyectos colectivos y nuevas amistades, demostrando que envejecer no significa retirarse, sino reencontrarse con la vida.
- Habla también de un modelo flexible en red. ¿Qué significa eso?
Significa que el cohousing no tiene por qué ser un lugar fijo. En Cohousing 3C los residentes pueden cambiar temporalmente de ubicación y vivir durante un tiempo en otro centro de la red, sin perder servicios. Si vive en una zona rural, por ejemplo, y quiere ir a vivir cerca de la playa sólo tiene que solicitarlo y en el momento que haya una plaza se le asigna.
Ya tenemos proyectos en marcha en Canencia y Cubas de la Sagra (Madrid), La Manga del Mar Menor (Murcia), Aranda de Duero (Burgos), Granja de Torrehermosa (Badajoz) o en el Club de Golf de Cuenca, pero hay en estudio muchas localizaciones más en lugares con encanto e incluso en Madrid capital. Es una forma de mantener el mismo estilo de vida, pero en diferentes entornos.
- ¿Cuáles diría que son los pilares sobre los que se asienta Cohousing 3C?
Casi a modo de resumen, diría que Cohousing 3C se asienta sobre cuatro pilares fundamentales: seguridad económica, comunidad activa, bienestar y prevención de la salud, y libertad de movimiento.
La seguridad económica permite vivir sin la constante preocupación por los gastos, facilitando tranquilidad y estabilidad. La comunidad activa garantiza que nadie se sienta solo: se crean vínculos, se comparten intereses y se participa en la vida cotidiana, lo que aporta sentido y alegría.
El bienestar y la prevención de la salud no solo se refieren al cuidado físico, sino también al equilibrio emocional y mental, fomentando hábitos saludables y experiencias enriquecedoras. Y, por último, la libertad de movimiento asegura que cada persona pueda elegir cómo, cuándo y con quién relacionarse, sin sentirse limitada por la edad o la dependencia.
Con estos cuatro pilares construimos un modelo pensado para que las personas mayores vivan con dignidad, propósito y alegría. En el fondo, se trata de repensar cómo queremos vivir juntos, de crear espacios donde la madurez sea un tiempo de conexión, de crecimiento personal y de disfrute compartido, demostrando que envejecer puede ser sinónimo de plenitud y vitalidad.
- ¿Qué impacto cree que puede tener este modelo en la forma de envejecer en España?
Sinceramente, creo que este modelo puede marcar un antes y un después en la forma de envejecer en España. Tradicionalmente, solemos asociar la vejez con la dependencia, con limitaciones y con cuidados médicos centrados únicamente en la asistencia. Este enfoque nuevo condiciona tanto la percepción social como las decisiones personales sobre cómo queremos vivir nuestros últimos años.
Porque lo que propone este modelo es justamente lo contrario, ya que pone el foco en la libertad de decidir, en la autonomía dentro de un marco seguro, en la construcción de comunidad y en la posibilidad de vivir con propósito y sentido cada día.
Además, no se trata solo de un cambio de mentalidad, sino que tiene una base económica sólida y transparente, lo que aporta tranquilidad y seguridad tanto a las personas mayores como a sus familias. Es un modelo que une bienestar, socialización, sostenibilidad financiera y planificación de la vida en la vejez, y que desafía la idea de que envejecer necesariamente implica resignación o aislamiento.
En definitiva, representa un cambio cultural profundo, que va más allá de la vivienda o de los cuidados: redefine cómo concebimos la etapa de la vejez y abre la puerta a vivirla con plenitud, autonomía y alegría, algo que considero no solo necesario, sino urgente en nuestra sociedad.
- ¿Y si alguien quiere más información, qué puede hacer?
Muy fácil. Puede entrar en nuestra web www.cohousing3c.es o llamar al 652 81 35 70. Estaremos encantados de informar, enseñar el proyecto y resolver cualquier duda.