La OCDE, en su Informe Económico sobre España 2025, proyecta que el gasto en pensiones aumentará anualmente en 3,2 puntos porcentuales del Producto Interior Bruto (PIB) hasta 2050. Este incremento responde directamente al crecimiento de la población mayor y a la presión demográfica sobre el sistema de seguridad social español. Además, el gasto total vinculado al envejecimiento —que incluye pensiones, sanidad y servicios de atención a la dependencia— crecerá alrededor de 5,2 puntos del PIB durante el mismo periodo. Este crecimiento va más allá del gasto en pensiones para cubrir también el incremento en la demanda de servicios sociosanitarios y cuidados a largo plazo, fundamentales para una población cada vez más envejecida.
Este aumento significativo en el gasto plantea riesgos importantes para las finanzas públicas si no se implementan reformas que aseguren un equilibrio entre ingresos y gastos sociales. La brecha entre ingresos contributivos y gastos tenderá a ampliarse, profundizando el déficit fiscal y generando vulnerabilidad a futuras crisis económicas. Por ello, la OCDE destaca la necesidad de ajustar políticas y modernizar el sistema de pensiones para garantizar que los recursos sean suficientes y sostenibles en el largo plazo.
Entre las principales recomendaciones, la OCDE insta a España a realizar reformas estructurales para contener el aumento del gasto en pensiones. Se sugiere aumentar la edad efectiva de jubilación, mejorar la contribución laboral de los grupos más jóvenes y fomentar la inserción laboral de mayores y migrantes. Estas medidas están orientadas a elevar la tasa de dependencia y asegurar la sostenibilidad del sistema contributivo muchas décadas por venir.
La OCDE también subraya que mejorar la productividad laboral es clave para compensar el efecto del envejecimiento. Para ello, señala la importancia de facilitar el crecimiento de pequeñas y medianas empresas, incentivar la innovación y acelerar la transición energética con inversiones en eficiencia y descarbonización. Este último aspecto permitirá mejorar la competitividad del país y crear empleo estable y de calidad.
| Aspecto | Proyección hasta 2050 | Impacto o recomendación clave |
|---|---|---|
| Gasto en pensiones | Incremento de 3,2 puntos del PIB | Necesidad de reformas para contener déficit |
| Gasto total envejecimiento | Incremento de 5,2 puntos del PIB | Incluye pensiones, sanidad y cuidados a largo plazo |
| Crecimiento económico proyectado | 2,4% en 2025, 1,9% en 2026 | Fundamental para respaldar la recuperación fiscal |
| Medidas de ajuste recomendadas | Edad de jubilación, salario laboral activo y migración | Mejorar la sostenibilidad del sistema y la economía |
El envejecimiento acelerado en España es un fenómeno imparable que modifica la estructura demográfica y demanda una adaptación urgente. El informe refleja que el número creciente de personas mayores reduce la proporción de trabajadores activos frente a pensionistas, presionando el sistema de seguridad social y servicios públicos.
Al mismo tiempo, la OCDE destaca la fortaleza del mercado laboral español y la recuperación económica como base para impulsar las reformas necesarias. Un crecimiento sostenido del PIB y una mejor productividad permitirán financiar mejor los incrementos futuros en el gasto y mejorar la calidad de vida de las generaciones presentes y futuras.
https://www.oecd.org/en/publications/oecd-economic-surveys-spain-2025_abc5c435-en.html