La Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG) ha pedido al Ministerio de Sanidad conocer los criterios técnicos que se van a seguir a la hora de realizar los test de detección de coronavirus anunciados por el Gobierno.
En concreto, los geriatras de la SEGG quieren saber cuál será la estrategia a la hora de realizar estos test diagnósticos “a ancianos asintomáticos o con manifestaciones atípicas de la enfermedad que están ingresados en residencias de mayores”, según ha explicado esta Sociedad en un comunicado. La pregunta abierta que lanzan desde la SEGG es “¿cuándo se harán esos test, a qué residentes y qué tipología de test?” serán.
En un comunicado, la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología considera “muy importante tener acceso a esta información para poder gestionar de la mejor manera la situación en las residencias de mayores”. Se estima que más de 8.000 personas han muerto en residencias de mayores desde que estallase la epidemia de coronavirus en España.
En su comunicado, la SEGG también pregunta por las razones que han llevado al Ministerio de Sanidad a solicitar a las Comunidades Autónomas información diaria sobre la situación de contagiados de coronavirus en hospitales mientras solo se solicita información sobre la situación en residencias de mayores dos veces por semana. Ello, advierte la SEGG, “a pesar de ser una población vulnerable y aquella que acumula la mayor mortalidad por la epidemia”.
Las preguntas de la SEGG llegan pocos días después de que el Gobierno anunciara que va a comenzar a realizar test de detección del coronavirus a una muestra de la población para analizar hasta dónde ha llegado la tasa de contagios en España.
Según explicó el Gobierno, se realizarán test rápidos a más de 62.000 personas. Quien resulte positivo, será sometido a una PCR, una prueba que requiere más tiempo, pero es más fiable.
La primera partida de test rápidos, que ya han sido entregados a las Comunidades Autónomas, se destinará a evaluar la tasa de contagio en colectivos como los sanitarios o los trabajadores y usuarios de residencias de mayores, los dos ámbitos en los que se ha producido una mayor prevalencia de la enfermedad.
A pesar de que las residencias de mayores han sido de los lugares con más contagios, un estudio de CEAPs cifra en poco más del 7 % de la población usuaria de estos centros el número de contagiados. Se estima que en España residen más de 400.000 personas en residencias de mayores y otras 200.000 personas son empleadas en estos centros.