Conchita García Alonso ha sido nombrada nueva directora médica de Valdeluz Mayores. La compañía ha comunicado este nombramiento que enmarca en la puesta bajo su mando de “todas las áreas asistenciales del nuevo proyecto Valdeluz”.
García Alonso, que ya trabajó en Valdeluz Mayores entre 2007 y 2017, dirigirá “el equipo sanitario de la compañía, actuando como interlocutor con todos los organismos y Administraciones, y liderando el diseño del modelo asistencial del operador en el futuro”.
Valdeluz Mayores es la vuelta al negocio residencial del Grupo Arpada, que ya vendió sus activos a Sanitas Mayores hace unos años. Ahora, junto a accionistas de HM Hospitales, impulsa esta nueva etapa de un grupo residencial que arrancó su segunda andadura con la apertura, el pasado noviembre, de Valdeluz Leganés. La compañía aspira a gestionar más de un millar de camas durante los próximos tres años.
De hecho, Valdeluz Mayores ya tiene tres proyectos en preparación, todos ellos en la Comunidad de Madrid: Valdeluz Rivas Vaciamadrid, Valdeluz Arroyomolinos y Valdeluz Madrid San Blas.
Ahora, y junto a Conchita García Alonso y su dilatada experiencia en el sector, la compañía se posiciona para dotar a sus residencias de mayores con los equipamientos necesarios para la llamada ‘nueva normalidad’ tras la epidemia de coronavirus, una vez quede atrás. El hecho de que HM Hospitales figure en el accionariado de la compañía supone un punto de partida interesante a la hora de posicionar a sus residencias como centros para vivir, pero sin descuidar la necesaria atención médica más allá de lo que habitualmente han hecho estos centros durante décadas.
La compañía, de hecho, ha indicado que su objetivo es “implantar la última tecnología” con “altas dotaciones en cuanto a instalaciones y un servicio asistencial 360 grados en colaboración con HM Hospitales”, que firmará la asistencia médica en las residencias de Valdeluz Mayores.
Aunque el sector se afana por reivindicar que las residencias de mayores no son hospitales, el refuerzo de la asistencia y atención sanitaria en estos centros es evidente. Aunque los primeros en dar impulso a esta posible nueva etapa en la vida de las residencias son los operadores directamente relacionados con la sanidad. Es el caso de Sanitas Mayores, cuyas residencias han reforzado su posición para prestar asistencia sanitaria creando incluso zonas más bien hospitalarias, aunque pensadas exclusivamente para posibles rebrotes de coronavirus en España. Está por ver si estos equipamientos se mantienen en el tiempo una vez se supere la pandemia.