Qida cierra una ronda de financiación de 3,6 millones de euros y emprende su expansión por el territorio nacional. La plataforma para encontrar cuidadores acaba de abrir oficina en un coworking de Madrid, donde prevé comenzar operaciones tras haberse implantado con éxito en varias localidades catalanas.
La oficina de Qida en Madrid tendrá, por el momento, cuatro empleados, quienes serán los encargados de arrancar la implantación de la plataforma en la capital. “Confiamos mucho en las posibilidades que existen en Madrid no solo por población, sino por notoriedad e importancia de la ciudad”, ha explicado Ramón Ceravalls, responsable de expansión de la startup.
Esta apertura se produce apenas unos días después de hacerse público que Qida ha cerrado una ronda de financiación por valor de 3,6 millones de euros. No es la primera vez que la plataforma recibe el apoyo de inversores, ya que en 2018 levantó 1,2 millones de euros.
La compañía se une, de este modo, a otras plataformas similares que también están recibiendo el apoyo del mercado, como Cuideo, que hace poco cerró una ronda por valor de 1,6 millones de euros para arrancar su expansión internacional en Francia. Curiosamente, Cuideo también tiene base en la capital catalana.
Según datos proporcionados por la propia compañía, Qida ya ha atendido a más de 1.500 familias ayudándolas a encontrar cuidador profesional. Se calcula que las operaciones que genera la plataforma ascienden a 600.000 euros mensuales, teniendo en cuenta los salarios que las familias pagan a los cuidadores.
La tecnología se está convirtiendo en un vehículo de alta importancia para las familias que buscan cuidador, ya que permite, a través de plataformas como Qida, encontrar al profesional que mejor se adapta a las necesidades de la persona que recibirá los servicios.
Sin embargo, en el mercado español ya existen varias plataformas similares, y aunque el mercado está por explotar porque apenas el 5 % de las contrataciones de cuidadores profesionales se canalizan a través de estas aplicaciones, llegará un momento en el que empezaremos a ver fusiones y adquisiciones, tal y como sucede en el sector residencial.