La Confederación Española de Organizaciones de Mayores (CEOMA) se ha sumado a la iniciativa que Carlos San Juan, un jubilado de 78 años, ha puesto en marcha en la plataforma Change.org. Se trata de una petición directa a las principales entidades bancarias del país, que en los últimos años no han dejado de cerrar oficinas para trasladar, progresivamente, la operativa a los canales digitales.
"Tengo casi 80 años y me entristece mucho ver que los bancos se han olvidado de las personas mayores como yo", explica el jubilado en la descripción de su campaña, a la que ya se han sumado más de 230.000 personas. "No nos merecemos esta exclusión", explica, a la par que reclama "un trato más humano en las sucursales bancarias".
"Puede que para una persona joven un trámite digital no suponga ningún esfuerzo, pero para muchos mayores sacar dinero o hacer una transferencia se vuelve imposible si es por una aplicación", explica. "Yo he llegado a sentirme humillado al pedir ayuda en un banco y que me hablaran como si fuera idiota por no saber completar una operación. Y he visto ese mal trato dirigido a otras personas. Duele mucho sentirse así", reconoce. Y añade que "las personas mayores existimos, somos muchas y queremos que nos traten con dignidad. Solo estamos pidiendo que se habiliten secciones en las sucursales en las que dejen de excluirnos", reclama en su mensaje.
Las entidades bancarias han cerrado casi 21.000 oficinas entre 2008 y 2021. Solo en el tercer trimestre de 2021 se cerraron más de 550 oficinas, dejando el total en poco más de 24.000, para todas las entidades bancarias. Sin embargo, el cierre de oficinas no es el único problema al que se enfrentan las personas mayores: las entidades destinan las oficinas que mantienen abiertas a operaciones comerciales, y no tanto a las del día a día. De hecho, los servicios de caja son cada vez más limitados, cuando no inexistentes en algunas sucursales, y suelen tener horarios restringidos que hacen muy difícil la operativa.
Ante este problema, y dado el impacto que está teniendo la petición en Change.org, CEOMA se ha sumado a la campaña para apoyar a las personas mayores que reclaman un trato humano en los bancos.
"Es urgente que las entidades bancarias que ya han reducido sus servicios no aíslen a las personas mayores que carecen de formación en las nuevas tecnologías y establezcan sinergias de colaboración con entidades como CEOMA, que, entre otras muchas de sus acciones, está especializada en ofrecer formación presencial y online en el área de las nuevas tecnologías desde el año 2003", explican en un comunicado. "Ya es hora de eliminar el edadismo, es imprescindible seguir trabajando y fomentando el buen trato, eliminando el aislamiento", añaden.
Desde la Plataforma de Mayores y Pensionistas (PMP) se han sumado a estas reivindicaciones y han llegado a calificar de “maltrato” y “edadismo” esta situación, según ha explicado Ángel Rodríguez Castedo, presidente de esta plataforma que ha pedido a las Autoridades “la aprobación de marcos normativos que protejan los derechos de las personas mayores respecto al acceso a los servicios bancarios”.