La Fundación Economía y Salud impulsó hace unos días la figura del ‘paciente activo’ durante el III Foro de Pacientes, ‘Aportando valor desde la perspectiva de los pacientes’, celebrado en el Hospital Universitario San Juan de Alicante.
La figura del ‘paciente activo’ se basa en la premisa de empoderar al paciente para que tenga capacidad de decidir y resolver problemas relacionados con su enfermedad, sobre la que toma poder de decisión basado en pensamiento crítico informado.
Con este rol en mente, el III Foro de Pacientes de la Fundación Economía y Salud buscó fórmulas para implementar a gran escala este nuevo enfoque asistencial sanitario. “Conocer la subjetividad del ciudadano adquiere más relevancia para integrarlo en la gestión del proceso y en la toma de decisiones”, destacó Beatriz Massa, gerente del Departamento de Salud de Alicante-Sant Joan D’Alacant, quien añadió que su departamento busca “conocer las expectativas de nuestros pacientes” para que “forme parte de los procesos y participen en la toma de decisiones de su propia enfermedad”, lo que considera “especialmente relevante”.
Los expertos reunidos en la jornada coincidieron en la necesidad de dar más importancia al propio papel que puede desempeñar el paciente en el afrontamiento de su enfermedad. No solo desde el punto de vista personal, sino del científico-estratégico. “Para conseguir unos buenos resultados en salud y hacerlo de forma eficiente es imprescindible que pensemos en el paciente, en sus inquietudes, en sus temores, en sus esperanzas. Para alcanzar una atención sanitaria basada en valor es necesario conocer la perspectiva del paciente, los resultados que valoran más, tanto en calidad de vida como en salud, así como su experiencia en las distintas rutas asistenciales”, subrayó Alberto Giménez Artés, presidente de la Fundación Economía y Salud.
Artés añadió que, con este foro, se ha buscado “escuchar sus experiencias [de los pacientes, más de 70 en la jornada] a lo largo de la enfermedad, que nos permita un diagnóstico más preciso sobre en qué media los recursos que empleamos consiguen los mejores resultados en salud, orientando de esta forma nuestra actividad futura”.
Durante el foro, los pacientes fueron coordinados por profesionales sanitarios, organizados en siete grupos en función de la patología que padecen: ictus, infarto de miocardio, diabetes, enfermedad pulmonar crónica (EPOC), cáncer de mama, cáncer de colon y depresión.
Asimismo, los asistentes recibieron formación en habilidades de comunicación a través de un taller de estrategias del lenguaje, el diálogo y la escucha activa, orientado a mejorar la comunicación entre médico-paciente y en el entorno familiar, a cargo del experto en comunicación sanitaria, expresión y lenguaje, Julio García, director de comunicación de la Fundación.
Dentro de las mesas de trabajo de este encuentro y de los dos celebrados con anterioridad en Madrid y Andalucía, los pacientes han resaltado que la enfermedad les ha obligado a superar barreras y les ha supuesto, en muchos de los casos, un aprendizaje a la hora de llevar a cabo hábitos de vida saludable y de autocuidado.
Por otro lado, otros han destacado la dificultad que les ha supuesto reincorporarse a la vida laborar o actividades cotidianas como conducir y a buscar soluciones alternativas para desenvolverse con normalidad. Cuestiones que se deben abordar necesariamente desde el sistema sanitario para mejorar la calidad de vida de todas las personas. “La mejor herramienta en sanidad es la relación humana”, apuntó Miguel Mínguez, consejero de Sanidad Universal y Salud Pública de la Comunidad Valenciana.