Los ancianos y la necesidad de terapia con mascotas se ha convertido en un tema cada vez más creciente y destacado en el mundo actual. La terapia con mascotas se ha vuelto cada vez más importante para las personas mayores debido a los muchos beneficios que puede ofrecerles. Se sabe que la terapia con mascotas ayuda a la salud psicológica y física, mejora la cognición y la memoria, estimula la conversación, da compañía y proporciona un apoyo emocional muy necesario. Las mascotas también pueden tener un efecto reconfortante, calmante y terapéutico en las personas mayores y son una gran fuente de bienestar físico y psicológico.
Los centros de atención residencial suelen albergar a personas mayores que, debido a su avanzada edad, carecen de la energía y la movilidad necesarias para salir al exterior e interactuar regularmente con los animales de un zoo o un parque cercano. Para combatir esta situación, los centros de atención residencial pueden tener en plantilla a terapeutas de mascotas que ofrecen a los ancianos la oportunidad de interactuar con animales, o incluso animan a los residentes a que lleven consigo a sus propias mascotas.
En las últimas décadas, se han realizado múltiples estudios que demuestran que la terapia con animales de compañía es beneficiosa para las personas mayores en residencias. Estudios recientes han demostrado que los ancianos que reciben terapia con mascotas tienen una mejor calidad de vida, son más activos socialmente y presentan un mejor estado físico y de salud. La terapia con mascotas también puede provocar una reducción de la depresión, la ansiedad y el estrés, un aumento de la energía y un incremento de la actividad física.
Los programas aprobados de terapia asistida con animales para ancianos pueden incluir actividades como guiar a los ancianos en el cuidado de los animales y proporcionar un entorno de apoyo, ya que ambos pueden fortalecer las relaciones interpersonales entre el anciano y su mascota. Los cursos también pueden hacer hincapié en la seguridad, el establecimiento de una buena higiene y los métodos de manejo. Este tipo de terapia implica movimiento físico y compromete activamente a los ancianos en tareas significativas, haciéndoles sentir un propósito y una independencia.
Además, la terapia con animales de compañía proporciona una amplia gama de beneficios físicos, como una mejora de la respiración, una reducción de la fatiga y un aumento de la variabilidad del ritmo cardíaco, al tiempo que proporciona beneficios emocionales, como un aumento de los niveles de confianza, una reducción de la depresión y una mejora del sentimiento de autoestima. Por último, la terapia con mascotas también puede aportar beneficios sociales, como la mejora de las habilidades de socialización y comunicación, el aumento de la motivación y el aumento de la diversión.
La terapia con animales de compañía puede facilitar el funcionamiento físico, social, emocional y cognitivo de las personas, y su principal objetivo es proporcionar consuelo y compañía a las personas que se sienten solas, deprimidas o que sufren discapacidades físicas o mentales.
La musicoterapia es un método en el que se utiliza el uso terapéutico de la música para mejorar la salud psicológica, la salud fisiológica y la calidad de vida. La terapia con mascotas es un método similar, ya que implica el uso terapéutico de un animal como forma de tratamiento e intervención.