Albertia está recibiendo donaciones, regalos y muestras de cariño que la compañía ha querido compartir con toda España. A través de un comunicado difundido a los medios de comunicación, la compañía de gestión residencial ha reunido ejemplos que están viviendo algunas de las residencias de mayores de Albertia en varias ciudades españolas.
En Albertia Lugo, la Fundación FDI ha gestionado el envío de materiales de protección y cartas para los usuarios del centro, gestos que la compañía enmarca en el “afecto y cariño” que muchas personas están haciendo llegar a los mayores.
En la residencia de mayores Albertia Moratalaz, familiares y trabajadores han enviado pasteles a los internos “junto a mensajes de ánimo” que suponen una inyección de esperanza para los mayores, confinados en estos centros hasta que pasen los peores capítulos de la pandemia. El centro también ha recibido “mascarillas de diversas asociaciones y pantallas protectoras”, así como “decoraciones para las habitaciones”, demostrando el valor que está reconociendo la sociedad, por fin, a los mayores.
Además, los alumnos de Infantil del Colegio Gredos San Diego Moratalaz han hecho y enviado dibujos que están alegrando los días a los residentes del centro. Y la floristería Silvosa Hnos. se ha encargado de enviar flores al centro para alegrar la primavera a los usuarios y trabajadores, quienes están haciendo un esfuerzo sobrehumano por proteger a los mayores.
En Albertia Mirasierra, vecinos y entidades han enviado mensajes de cariño a los trabajadores y usuarios, y empresas como Recreativos Franco han donado materiales de protección.
Estos gestos también se han visto en Puertollano, donde el Ayuntamiento de la localidad ha donado EPIs, o en Zaragoza, donde se han entregado tablets por parte del IASS y de Nett Formación para que los mayores puedan hacer videollamadas con sus familiares. También, empresas como Leroy Merlin o Aquanima Grupo Santander han donado pulverizadores a Albertia para desinfectar los centros, y el Ayuntamiento de Alagón han entregado pasteles con motivo del Día de San Jorge, el 23 de abril.
Además, los trabajadores de Albertia, no contentos con estar dejándose la piel para seguir cuidando a sus mayores, envían prácticamente a diario desayunos a las residencias de mayores de Albertia para que tanto los usuarios como sus compañeros puedan comenzar el día con dulzura. Porque es en los momentos más difíciles en los que se ve la mayor humanidad.