Lares pide al Gobierno levantar el confinamiento en residencias de mayores. “Solicitamos el reintegro de los derechos fundamentales de nuestros mayores: socialización, trato digno, duelo y otros muchos aspectos esenciales de ciudadanos de pleno derecho”, explican en la misiva.
La carta se divide en 12 puntos o peticiones que hace Lares al Gobierno de cara a aliviar el confinamiento de los mayores en residencias. En la práctica totalidad de estos centros, los usuarios se mantienen confinados en sus habitaciones sin posibilidad de realizar incluso actividades grupales para evitar posibles contagios. Una situación que los gerentes de residencias comprenden que es dura, pero también necesaria para evitar contagios, a pesar de que el sector en general es consciente de que puede generar problemas desde físicos hasta psicológicos en los usuarios.
De ahí que el sector esté pidiendo con insistencia la realización masiva de test de detección del coronavirus en residencias de mayores tanto a los usuarios como a los trabajadores; de este modo, se podría levantar el confinamiento en aquellos centros sin casos positivos, al estar además cerrados al exterior.
Por ello, Lares considera que este confinamiento ya es “innecesario”, pues “ahora que el colapso sanitario no existe, no pueden seguir ignorándose las necesidades de estas personas mayores”. “Es contraproducente para su calidad de vida restringirle la actividad en su habitación cuando no es positivo o no hay positivos en ese centro”, explica Lares.
Lares propone un plan de desescalada para residencias de mayores, consistente en medidas como la instalación de arcos nebulizadores de soluciones desinfectantes a la entrada de cada residencia de mayores de España, la provisión de materiales de protección a cada persona externa que entre a estos centros y a los trabajadores, la realización masiva de test PCR o la autorización del uso de zonas comunes en centros con bajo riesgo de transmisión.
Desde Lares incluso cuantifican lo que costaría la implementación de estas medidas en centros sin ánimo de lucro: 5,4 millones de euros la instalación de arcos nebulizadores; algo más de tres millones de euros al mes la provisión de materiales y equipos de protección; y nueve millones de euros la realización de test a todos los usuarios y trabajadores de las residencias de mayores de España.
Lares, además, aboga por atender a los infectados en hospitales y nunca en las propias residencias, en línea con las peticiones del sector durante esta crisis. “Una persona mayor no tiene menos derecho a la sanidad pública por tener su hogar en una residencia que por entrar, como ciudadano, por el servicio de urgencias de un hospital”, dicen con buen criterio. “Las residencias de mayores están pensadas para cuidar, no para curar”, añaden.
No obstante, en casos en los que los mayores estén en su última etapa vital, Lares pide que un familiar pueda alojarse con el usuario para que se despida en compañía, siempre respetando las medidas de seguridad. También abogan por extender esta medida a centros hospitalarios, en los mismos términos de seguridad y precaución.
Con esta carta, Lares busca contribuir a la desescalada mirando por los mayores y por sus derechos, sobre todo ahora que la epidemia empieza a controlarse y pueden empezar a plantearse estrategias para ‘el día después’.