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Emprender siendo sénior es más habitual en España que en el resto de Europa

Emprendedores sénior en España: una figura cada vez más frecuente.
Emprendedores sénior en España: una figura cada vez más frecuente.
martes 13 de diciembre de 2022, 08:00h

A los españoles nada les frena en el sueño de ser sus propios jefes, ni siquiera la edad. Emprender siendo sénior es una alternativa muy habitual en España, que lidera en el continente europeo.

Llegados a una edad, los trabajadores se encuentran en una situación muy comprometida. España ocupa una de las mayores tasas de desempleo para mayores de 55 años de los cuales, un elevado porcentaje son parados de larga duración. En comparación con otros países del entorno europeo, como Alemania, Portugal o Suecia, los séniores españoles abandonan el trabajo por cuenta ajena mucho antes. Por ello, emprender siendo sénior es una opción que siempre está sobre la mesa, ya sea por vocación o por necesidad.

Emprender siendo sénior en España

Siempre se ha dicho que España es un país de autónomos y emprendedores. Gran parte del tejido empresarial está constituido por pequeñas y medianas empresas, formadas, en muchos casos, por un único trabajador.

Los españoles mayores de 55 años, al verse sin trabajo y sin muchas opciones de encontrar uno, optan por emprender un nuevo reto profesional: el trabajo por cuenta propia.

Junto con Polonia, España lidera el ranking europeo de personas que deciden emprender siendo sénior, es decir, cumplir el sueño de montar su propio negocio. Y, de acuerdo a las estadísticas, no les va nada mal, pues cerca de 1 de cada 3 autónomos sobrepasa los 55 años de edad.

Emprender tras la jubilación

Los recortes de personal en las empresas suelen perjudicar a los trabajadores de más edad. En muchas ocasiones, se ven forzados a una prejubilación, pero, en el peor de los casos, al despido.

Sin embargo, emprender siendo sénior no es una vía únicamente para aquellos que han perdido su trabajo. Muchos trabajadores gozan de buena salud al alcanzar la edad de jubilación. Son personas que vivirán cerca de 20 años más y el no tener una actividad puede suponer una merma a nivel físico y emocional.

Por ello, deciden cambiar el rumbo y abrir un pequeño negocio que les mantenga ocupados, de tal forma que se sienten útiles y válidos para el sistema.

Llegar a sénior no es sinónimo de hacerse a un lado. Su papel en la sociedad es cada vez más importante. Y el emprendimiento es una vía muy interesante para estos perfiles tan experimentados profesionalmente.

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