Desarrollar terapias no farmacológicas en los centros residenciales es clave para mejorar la salud y la calidad de vida de las personas usuarias, ya que promueven un envejecimiento más activo, mediante la prevención, la conservación y la recuperación de habilidades físicas y mentales.
Estas terapias se centran en el confort de la persona, abordando no solo los aspectos físicos de la salud, sino también los aspectos emocionales, sociales y cognitivos. Proporcionan un enfoque integral que tiene en cuenta la totalidad de la persona.
“Es clave que las residencias de personas mayores cuenten con actividades que les permitan reforzar y preservar sus habilidades motrices y cognitivas”, explica Carla Pérez, Social Advisor de CleceVitam en Cataluña, quien añade: “Las terapias no farmacológicas pueden ayudar en el tratamiento de algunos casos de demencia o Alzheimer, como medida complementaria al tratamiento de prescripción médica”.
¿Cuáles son las diez terapias no farmacológicas que mejor funcionan?
- Musicoterapia. El uso adaptado de elementos musicales refuerza el tratamiento terapéutico de la salud emocional de las personas usuarias, gracias a la influencia positiva en aspectos como la creatividad, la potenciación de los sentidos y la reducción del estrés y de la ansiedad.
- Montessori. El método Montessori se centra en potenciar la autonomía, la motivación y la seguridad de la persona mediante actividades que estimulan las funciones sensoriales y motoras. De esta manera, se ralentizan los síntomas asociados a las demencias y se contribuye a retrasar el deterioro cognitivo.
- AVD. Ayudar a dotar a las personas de autonomía para llevar a cabo las Actividades de la Vida Diaria, es decir, las tareas que componen la actividad cotidiana y que permiten establecer hábitos y rutinas básicas como son vestirse, asearse o comer.
- Ejercicio físico. El uso de técnicas que combinan el ejercicio aeróbico, de equilibrio, de fuerza y de flexibilidad, así como actividades de coordinación, deportivas y de psicomotricidad para fomentar la agilidad y el mantenimiento de la autonomía de las personas.
- Estimulación cognitiva. Actividades y técnicas enfocadas a mantener o mejorar las capacidades cognitivas de una persona a través de ejercicios centrados en trabajar la memoria, la atención, la planificación, la solución de problemas, el razonamiento y el control.
- Terapia de reminiscencia. Las personas usuarias, acompañadas por el equipo de profesionales, recuerdan y relatan recuerdos del pasado con el objetivo de evocar sentimientos positivos y de reafirmar su identidad personal.
- Roboterapia. Consiste en el uso de robots, que generalmente simulan animales, dotados de inteligencia artificial y múltiples sensores capaces de responder a estímulos externos e interactuar con las personas usuarias.
- Terapia asistida con animales. Las personas usuarias cuentan con la compañía temporal de animales, generalmente de perros, como recurso terapéutico para mejorar sus funciones físicas, cognitivas y emocionales.
- Estimulación multisensorial. Enfoque terapéutico mediante el cual se emplean diversos estímulos para desarrollar los sentidos y el reconocimiento de texturas, temperaturas, tamaños o formas, entre otros. Un ejemplo es la sala multisensorial de CleceVitam Ponent, que cuenta con la cabina de hidroterapia Lucía.
- Terapia de orientación a la realidad. Conjunto de técnicas que permiten reorientar a la persona en el tiempo (orientación temporal), el espacio (orientación espacial) y respecto a su propia persona (orientación personal) mediante la conexión de experiencias del pasado con sucesos actuales.
Fuente: CleceVitam 22 de noviembre 2023