gestionydependencia.com
Estudio sobre los Procesos de Desinstitucionalización y Transición a Modelos de Apoyo Personalizados y Comunales

Estudio sobre los Procesos de Desinstitucionalización y Transición a Modelos de Apoyo Personalizados y Comunales

miércoles 14 de febrero de 2024, 17:30h

El concepto de desinstitucionalización es el proceso por el cual se sustituyen los servicios y apoyos que antes se prestaban en y desde servicios como residencias de larga estancia por apoyos y servicios individualizados, personalizados y basados en la comunidad. A lo largo de las dos últimas décadas, cada vez más esfuerzos de desarrollo comunitario han llevado a una mayor comprensión de cómo funciona la desinstitucionalización y por qué es un paso crucial en el sistema de bienestar social. En algunos casos, la transición ha tenido cierto éxito y todavía está en marcha.

¿Qué es la Desinstitucionalización?

La Desinstitucionalización es el proceso de transición de la atención a largo plazo y otros entornos institucionales a opciones de atención comunitaria. El término "desinstitucionalización" se refiere sobre todo a la comunidad de discapacitados, y suele designar el proceso por el cual las residencias y centros de formación institucionales pueden sustituirse por la asistencia residencial o por el desarrollo de habilidades para la vida independiente. La desinstitucionalización puede implicar muchos aspectos: la gestión de otros nuevos tipos de servicios, la educación de la comunidad, cambios en las normas administrativas y el desarrollo de nuevos tipos de apoyo en el lugar de trabajo y de defensa de los intereses de los afectados.

¿Por qué es necesaria la desinstitucionalización?

La desinstitucionalización es un cambio permanente de la atención centrada en la institución, y muchos expertos han propuesto que esta transición es necesaria. La razón principal por la que se ha propuesto la desinstitucionalización es por las consecuencias negativas de la atención institucional a largo plazo. Por ejemplo, la atención institucional a largo plazo puede crear aislamiento social, falta de autodeterminación y falta de libertad de movimientos. Además, los entornos institucionales pueden no estar diseñados para apoyar las preferencias personales, los deseos y los planes de las personas que reciben la asistencia. En lugar de esto, se propone la desinstitucionalización para ofrecer opciones en las que las personas puedan participar mejor en las actividades que disfrutan, así como tomar decisiones y elecciones significativas sobre sus actividades cotidianas.

¿Cómo se consigue la desinstitucionalización?

La desinstitucionalización puede ser un proceso complejo que implica a muchos niveles diferentes de partes interesadas. En el proceso pueden intervenir individuos, familias, empresas y organismos. Un enfoque potencial para lograr la desinstitucionalización es elaborar un programa de gestión del cambio que ayude a facilitar la transición de la asistencia institucional a las opciones comunitarias. Esto implicaría identificar y recomendar nuevos tipos de servicios de apoyo, y trabajar en colaboración con las partes interesadas para desarrollar nuevas políticas y procedimientos.

Primero, para que los traslados de las instituciones de asistencia a largo plazo tengan éxito, es importante que haya nuevas opciones de vivienda disponibles. A menudo, el desarrollo de arreglos residenciales personales o compartidos es preferible tanto a las residencias de atención institucional como a la vida completamente independiente. Además, hay que desarrollar oportunidades de desarrollo de aptitudes, formación y actividades basadas en la comunidad.

Beneficios de la Desinstitucionalización

El desinstitucionalismo puede aportar muchos beneficios a las personas con discapacidades intelectuales y del desarrollo. El primero y más importante es que puede proporcionar a las personas un mayor acceso a los recursos que necesitan para fomentar una integración comunitaria satisfactoria. Estos recursos pueden incluir programas de desarrollo de aptitudes educativas y profesionales, oportunidades sociales y los medios de transporte necesarios para participar en estas actividades. Además, la desinstitucionalización puede proporcionar a los residentes una mayor privacidad y libertad.

Resumen

Se propone la desinstitucionalización como un cambio necesario que puede proporcionar una vida más comprometida e implicada a las personas con discapacidades intelectuales y del desarrollo. Los aspectos principales de la desinstitucionalización incluyen la creación de nuevos tipos de entornos residenciales, junto con el desarrollo de nuevos tipos de apoyos y recursos necesarios para una participación comunitaria significativa. Aunque la desinstitucionalización puede ser compleja, el resultado final suele considerarse un cambio beneficioso y necesario.

Fuente: Proyecto EDI

¿Te ha parecido interesante esta noticia?    Si (0)    No(0)

+
0 comentarios