El blog CREA del Imserso ofrece un conjunto de recomendaciones para tratar de forma adecuada a personas con Alzheimer u otros tipos de demencia. La guía se centra en mejorar la comunicación, adaptar los entornos y preservar la dignidad del paciente, orientada a profesionales, cuidadores y familiares.
Comunicación empática y efectiva
Simplificación del lenguaje
Las personas con demencia comprenden mejor los mensajes si se utilizan frases cortas, pausadas y directas. El uso del nombre propio, el contacto visual y un tono de voz tranquilo favorecen la comprensión y reducen la ansiedad.
Evitar la confrontación
Si una persona con Alzheimer expresa algo erróneo, no es recomendable contradecirla de forma brusca. Validar su emoción sin discutir el contenido contribuye a mantener la calma y la conexión afectiva.
Entornos estructurados y seguros
Espacios conocidos y accesibles
El entorno debe ser reconocible, con objetos familiares, buena iluminación y señalización clara. Minimizar los ruidos y los estímulos excesivos mejora la orientación y reduce el riesgo de agitación.
Prevención de riesgos
Eliminar alfombras, cables u obstáculos, asegurar baños adaptados y evitar productos tóxicos al alcance son medidas básicas para evitar caídas y accidentes.
Actividades significativas y adaptadas
Rutinas diarias estructuradas
Establecer horarios fijos para levantarse, comer, pasear o descansar favorece la estabilidad emocional. Las rutinas aportan seguridad y disminuyen la confusión.
Estimulación con sentido
Las actividades deben ser familiares, agradables y adaptadas al nivel cognitivo. Escuchar música conocida, manipular objetos con valor emocional o mirar fotos antiguas puede activar recuerdos positivos.
El papel esencial de cuidadores y familias
Acompañamiento emocional
Escuchar, sostener la mirada, tocar con respeto y estar presentes emocionalmente son herramientas de apoyo fundamentales. La atención debe basarse en la comprensión, no en la corrección.
Formación continua y autocuidado
Los cuidadores necesitan apoyo emocional y formación específica para comprender la evolución de la enfermedad. El agotamiento puede poner en riesgo la calidad del cuidado y la salud del propio cuidador.
Tabla de buenas prácticas para la interacción con personas con Alzheimer
Área de atención |
Recomendación clave |
Beneficio esperado |
Comunicación |
Usar frases simples, pausadas y contacto visual |
Mejor comprensión y menos ansiedad |
Entorno físico |
Eliminar riesgos, buena señalización, luz natural |
Prevención de caídas y orientación clara |
Actividades diarias |
Fomentar rutinas estables y tareas familiares |
Seguridad emocional y activación cognitiva |
Cuidadores |
Ofrecer formación y espacios de respiro |
Mejora del cuidado y bienestar familiar |
Principios fundamentales de la atención respetuosa
Centrarse en la persona, no en la enfermedad
Cada persona con Alzheimer conserva una historia, valores y preferencias. La atención debe centrarse en lo que aún puede hacer, no en lo que ha perdido.
Preservar la dignidad en todo momento
Desde el lenguaje que se utiliza hasta el modo de vestir o alimentar, todo debe orientarse a reforzar la dignidad y el respeto. Nunca infantilizar ni tratar como si no estuviera presente.
Adaptarse a la progresión de la demencia
A medida que la enfermedad avanza, es esencial adaptar las estrategias de comunicación, reducir las exigencias y cambiar el tipo de estímulos. La flexibilidad es clave para mantener el vínculo.
Resumen
Tratar a personas con Alzheimer requiere una combinación de empatía, técnica y sensibilidad. Las recomendaciones del CREA ofrecen una guía práctica basada en el respeto y la dignidad, que facilita la convivencia diaria y mejora la calidad de vida tanto del paciente como de su entorno. Incorporar estas pautas permite humanizar los cuidados y fortalecer la red de apoyo en uno de los mayores desafíos sociosanitarios de nuestro tiempo.
Referencias
https://blogcrea.imserso.es/es/-/recomendaciones-para-tratar-con-clientes-con-demencia