En España se producen casi 95 millones de consultas médicas al año entre personas mayores de 60 años. Ahora, Ever Health calcula que casi 76 millones se podrían despachar con telemedicina.
¿Puede la telemedicina reducir las listas de espera en sanidad? La respuesta breve es ‘sí’. Con la misma rotundidad. Así lo cree la compañía Ever Health, que cifra en casi 76 millones de consultas al año por parte de mayores de 60 años las que potencialmente podrían despacharse con telemedicina. El total de consultas computado para este grupo de edad roza los 95 millones de consultas al año, por lo que la cifra que podría atenderse a distancia representa un porcentaje superior al 80 %. Es decir: 8 de cada 10 consultas médicas por parte de mayores de 60 años podrían atenderse en modalidad de telemedicina.
Es más, si en lugar de un sistema de telemedicina clásico (hablar con un médico a través de videollamada, por ejemplo) se utilizase telemedicina avanzada, hasta el 92 % de las consultas serían aptas, lo que ahorraría más de 87 millones de visitas a hospitales, centros y consultas médicas al año. La telemedicina avanzada permite prescribir recetas médicas a distancia, entre otras posibilidades entre las que también se encuentran, en casos muy avanzados, la posibilidad de realizar mediciones de constantes vitales a distancia.
Telemedicina en mayores de 60 años para reducir listas de espera en Sanidad
Por supuesto, el uso de telemedicina en mayores de 60 años no solo ahorraría tiempo y dinero, dejando la asistencia presencial a casos en los que fuera estrictamente necesario, sino que mejoraría su acceso a asistencia sanitaria. No en vano, el 45 % de los mayores de 60 años sufre algún problema de movilidad, que en casos especialmente graves impide a la persona valerse por sí misma. En tales casos, el acceso a asistencia sanitaria por telemedicina otorgaría un nivel de autonomía personal a estos pacientes nunca antes visto.
La pandemia ha puesto a la telemedicina en el epicentro de la asistencia sanitaria en España, debido a que se convirtió en el refugio de muchos pacientes (y médicos) cuando los contagios de coronavirus estaban en máximos. Esto motivó a las principales aseguradoras a ofrecer servicios de telemedicina en seguros privados de salud, algo a lo que también se sumó la sanidad pública, que durante estos últimos meses no ha dejado de atender a pacientes bajo estos formatos, llamados a quedarse en la sociedad como una opción más a la hora de acceder a asistencia sanitaria, siempre que sea posible.
No obstante, en realidad no es una novedad: desde 2016, compañías como Sanitas ya ofrecen servicio de telemedicina a sus clientes. Ahora, sin embargo, se ha convertido en algo habitual, hasta el punto de que algunas compañías de telecomunicaciones ya ofrecen este servicio como complemento a sus productos habituales. La tecnología no dejará de facilitar la vida a las personas durante los próximos años.
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