Asispa presenta los Grupos de Apoyo Mutuo para cuidadores familiares, donde se busca combatir la fatiga emocional y aportar herramientas para gestionar mejor estas situaciones.
Asispa ha presentado los Grupos de Apoyo Mutuo, enfocados a cuidadores familiares para que puedan combatir la fatiga emocional y obtener herramientas que les ayuden a gestionar mejor el día a día como cuidadores de un familiar.
Estos Grupos de Apoyo Mutuo se han ido consolidando como una experiencia enriquecedora tanto para las personas participantes como para los psicólogos dinamizadores.
Así lo confirma Santiago Mateos, coordinador de estos talleres, cuando explica que “en muchas ocasiones se ha detectado que los cuidadores sufren aislamiento por priorizar el trabajo del cuidado a la persona mayor sobre su propia vida. Poco a poco, van cortando lazos que les unen tanto a su vida social como a sus propias ilusiones vitales. El alivio que encuentran los participantes muchas veces radica en el desahogo al expresar la ansiedad que provoca la difícil tarea de cuidar de un familiar dependiente”.
Grupos de Apoyo de Asispa para cuidadores familiares
Además de esta búsqueda de desahogo, los grupos de Asispa tienen la intención de proteger la salud mental de los cuidadores a través de terapias grupales que permiten entrar en contacto con personas en una situación similar. Junto a psicólogos, “ofrecen otras maneras de encarar el objetivo de cada cuidador”, explican desde Asispa.
El trabajo grupal permite, además, obtener conocimiento sobre las estrategias que mejor funcionan para sobrellevar estas situaciones, a menudo estresantes. De ahí que estos grupos sean muy apreciados por sus participantes y una herramienta eficaz para psicólogos que tratan a cuidadores no profesionales, pero también a los profesionales.
Se ha demostrado que cuidar de otra persona es una tarea compleja, independientemente del componente o no de profesionalidad que medie. Pero también se ha demostrado que el trabajo en equipo y el hecho de compartir con terceros situaciones similares supone una válvula de escape que permite amortiguar el daño psicológico y empoderar al cuidador para que pueda afrontar la situación con mayor serenidad. Por ello, estos grupos de apoyo de Asispa son una herramienta de interés y necesidad para los cuidadores, gracias a la profesionalidad de lo equipos que los dirigen y a la experiencia acumulada de décadas trabajando por las personas.