Las bonificaciones a la contratación de personas con discapacidad se mantendrán intactas

El Ministerio de Trabajo ha escuchado a la sociedad civil y no modificará las normas sobre contratación de personas con discapacidad.

La sociedad civil, y en especial la rama que trabaja en favor de las personas con discapacidad, está de enhorabuena: el Ministerio de Trabajo no modificará las normas sobre bonificaciones a la contratación de personas con discapacidad.

Como explican desde la Fundación Alares, los cambios sugeridos iban a tener “un impacto muy directo en el colectivo de las personas mayores con discapacidad”. De hecho, la norma vigente ha permitido, entre otras cosas, que casi el 67 % de las personas de entre 45 y 64 años con discapacidad tengan un trabajo, frente al 47 % de quienes, en esa misma franja de edad, no tienen ninguna discapacidad.

Contratar a personas con discapacidad enriquece a las empresas

“Los Centros Especiales de Empleo favorecen al empleo de las personas mayores con discapacidad, ya que la discriminación por edad es sensiblemente inferior al de la empresa ordinaria. Hay que tener en cuenta que las personas con discapacidad tienen mayor riesgo de exclusión según van sumando diversidades y, en este sentido, la de la edad es transversal al igual que el género”, ha explicado Mar Aguilera, directora de Fundación Alares.

Las personas con discapacidad tienen mucho que aportar a las empresas, y aunque la legislación bonifica su contratación precisamente para fomentar su inclusión laboral, las empresas que ya han apostado por estos perfiles probablemente seguirían contratando incluso sin bonificaciones, al haber descubierto el potencial que tienen.

Cómo mejorar la vida de las personas con discapacidad

En todo caso, las bonificaciones a la contratación de personas con discapacidad siguen siendo necesarias para fomentar que más empresas apuesten por estas personas, igual de válidas y capaces que quienes no tienen ninguna discapacidad. Su grado de compromiso puede resultar, de hecho, incluso mayor, dado que ven como una oportunidad el hecho de que una empresa apueste por ellos en una sociedad que tiende a discriminar a las minorías.

Además, el trabajo refuerza sus capacidades, su recuperación -si es posible-, el mantenimiento de su autonomía y su autoestima, por lo que las empresas que contratan a personas con discapacidad estarán cambiando la vida a mucha gente e impactando de forma positiva en la sociedad, demostrando que todos somos igual de válidos y necesarios.