La Comunidad de Madrid estrena un nuevo modelo residencial en zonas rurales

La Comunidad de Madrid lidera la lucha contra la soledad no deseada de las personas mayores que viven en zonas rurales de la región, con la puesta en marcha del proyecto pionero Hacemos Hogar. El proyecto fue anunciado por Concepción Dancausa, consejera de Familia, Juventud y Políticas Sociales, en marzo de este año.

Proyecto Hacemos Hogar

El objetivo de Hacemos Hogar es proporcionar la atención, el apoyo y la asistencia que tanto necesitan las personas mayores de 65 años que viven en zonas rurales de la región. El proyecto trabaja para evitar que surjan problemas de dependencia en personas mayores sin un sistema de apoyo estable. Dado que muchos miembros de la familia de los ancianos se han marchado, el proyecto pretende abordar el problema de la soledad en las zonas rurales creando un sentimiento de comunidad y aumentando los lazos sociales entre las personas.

El proyecto se basa experimentalmente en viviendas comunitarias con capacidad para 12 usuarios, que básicamente implican que los residentes puedan compartir espacios vitales con otras personas de su misma edad y procedencia. Al proporcionar acceso a recursos compartidos, mejores cuidados, así como otros servicios y actividades, se ha sugerido que estas viviendas comunales pueden ayudar a reducir los sentimientos de soledad y aumentar la calidad de vida de las personas mayores.

El proyecto ha sido financiado por la Comunidad de Madrid, con el objetivo de reducir los costes asociados al cuidado de las personas mayores que viven en zonas rurales.

Se prevé que Hacemos Hogar beneficie hasta a 200 hogares de la comarca de la Sierra Norte, que cuenta con una larga trayectoria en el cuidado de sus ciudadanos mayores. Algunos responsables municipales y organizaciones ya se han declarado "zonas de territorios amigos de las personas mayores", y han dedicado esfuerzos a mejorar el bienestar de los mayores de 65 años, proporcionándoles un mejor acceso a servicios y asistencia.

Desde entonces, el proyecto ha recibido elogios por su enfoque innovador para combatir la soledad entre los mayores que viven en zonas rurales. Se ha sugerido como modelo de atención y asistencia que podría emplearse en otros países europeos. Se espera que el proyecto supere las expectativas y beneficie a las personas mayores que viven en zonas rurales de la Comunidad de Madrid durante muchos años.