El Grupo Casaverde, especializado en rehabilitación neurológica, ha difundido 10 consejos para familiares de pacientes con Daño Cerebral Adquirido (DCA), donde explica sencillos comportamientos que contribuirán a aliviar la vida de estas personas y de ellos mismos.
Cada 26 de octubre se conmemora el Día del Daño Cerebral Adquirido (DCA), una condición que afecta a más de 400.000 personas en España, según datos de la Federación Española de Daño Cerebral.
Existen diversas causas del daño cerebral adquirido, aunque las más frecuentes son enfermedades como el ictus. También algunos accidentes pueden provocarlo, así como tumores cerebrales con afectación a las funciones cotidianas del paciente.
Consejos para familiares de pacientes con daño cerebral adquirido
Independientemente de las causas del DCA, los pacientes se enfrentan a una pérdida de autonomía y de sus funciones básicas, que deben ser cubiertas, en cierto modo, por los familiares directos que les cuidan. Y es a esta población, en su mayoría mujeres, a quienes se ha querido dirigir el Grupo Casaverde este año, con un decálogo que recoge una serie de consejos para facilitar su día a día y, por supuesto, el del paciente:
- Hay que prestar toda la atención posible a nuestros seres queridos en esta situación y mostrar siempre lo mejor de nosotros porque ellos lo van a sentir de manera especial. Necesitan cariño y afecto constantes.
- Permanezcamos con ellos todo el tiempo que sea posible. Nuestras caricias y nuestros besos “hacen milagros”. Hay que estar cerca porque necesitan calor y cercanía.
- Hay que ser pacientes y constantes en sus cuidados. No desfallecer y ver en cada pequeño logro un importante paso hacia adelante. Disfrutar cada momento.
- Se debe establecer una comunicación permanente con ellos. Hablemos, cantemos, bailemos, enseñemos fotos y vídeos de la vida pasada y actual. Hay muchas formas de comunicar. La comunicación tiene un factor sanador.
- Participemos en los procesos de rehabilitación con los profesionales. Las familias somos una parte esencial en el proceso trabajando en colaboración con los profesionales que les atienden. Todos formamos parte de la rehabilitación.
- La ayuda de los familiares es imprescindible. Somos víctimas igual que el propio paciente, o a veces más, ya que somos conscientes de la situación.
- Hablemos de familias afectadas, no individuos, ya que nos cambia la vida a todos, a todo el entorno familiar: padres, hijos, cónyuges de manera más directa.
- Hay que vivir con optimismo y aceptar la situación. No desfallecer. Quererlo y aceptarlo tal y como está ahora. No perder la esperanza y dar ánimos siempre.
- Una leve sonrisa, una mueca, una mirada son la forma de expresar su sentimiento. Aprendamos o creemos un nuevo lenguaje. La mirada y sus gestos lo son todo.
- Luchar, luchar, luchar. No perder la batalla
