Cerca de 44.500 beneficiarios tendrán derecho a prestaciones por dependencia en 2030, lo que supondrá un gasto de más de 400 millones, un 40% más que ahora
Ambas instituciones se comprometen al desarrollo de acciones encaminadas a ofrecer soluciones a las necesidades de las personas, y así poder ofrecer mejor atención a las personas mayores o dependientes y sus familias.